
Un review y opinión de los Oscars 2024
Rodrigo Rengel
12 de marzo de 2024
El pasado domingo diez de marzo se llevó a cabo la 96º edición de los Oscars en el teatro Dolby, como es costumbre, en Los Ángeles, donde se premiaron las películas estrenadas en 2023 y 2024, cerrando las votaciones de los encargados de seleccionar los ganadores en febrero.
Empezando con la ceremonia y el anfitrión (Jimmy Kimmel), quien repite un año más, su desenvolvimiento fue peor que el del año pasado, pues sus chistes no cayeron bien, a diferencia de otros años, y se hace repetitivo. Aunque hubo una mejora respecto a los anteriores anfitriones, su acto ya no está gustando mucho a los espectadores y tal vez no dure mucho más. Incluso, para la próxima edición podríamos tener un anfitrión diferente y esperemos que uno nuevo, pero eso está por verse. La ceremonia y el ritmo de esta va mejorando desde las anteriores ediciones, pues ya encontraron la forma de cómo enganchar a la audiencia, sobre todo a los desinteresados del cine que aún así ven la premiación.
En cuanto a los actos musicales, el mejor de este año fue “I’m Just Ken” interpretado por Ryan Gosling, en compañía de Mark Ronson y Slash, sobre todo por la escenografía haciendo homenaje a Marilyn Monroe y el acto que en sí estuvo a la altura de lo que prometía. Billie Eilish tuvo una presentación bastante simple, pero la canción lo ameritaba, al ser más sentimental. El resto de interpretaciones se sintieron de “relleno”, sobre todo por ser actos más secundarios.

Ya entrando a las decisiones para los premios, este año no nos dio muchas sorpresas como las pudo haber dado; sin embargo, un premio que pudo no haber sido muy bien recibido por la gente fue el de “Mejor película animada”, un premio que tiende a dar mucho de qué hablar. Este año puede ser que la Academia se lo haya dado a Hayao Miyazaki, sobre todo como reconocimiento hacia su carrera, lo que no es nada extraño, pues la Academia tiende a hacer eso cuando siente que les debe un premio a alguien, y lo que hacen es entregárselo a su siguiente proyecto sin tomar mucho en cuenta el resto de nominados. Para mí debió ganar “Spiderman: Across the Spiderverse” que, si bien es una secuela y la Academia no suele premiar a secuelas o sagas, la película vuelve a innovar y propone más para lo que es la animación de hoy en día, así como lo hizo su predecesora “Spiderman: Into the Spiderverse”, que se llevó la estatuilla en 2018.
Otra sorpresa fue ver a Barbie irse con las manos casi vacías, pues “What Was I Made For?” les dio su único premio a “Mejor canción”, aunque, con toda sinceridad, sus únicas esperanzas eran los premios técnicos que se los repartieron entre “Poor Things” y la favorita de la ceremonia, “Oppenheimer”.
En cuanto a los premios de actuación, la mayoría de los resultados eran obvios. Existía el “riesgo” de que Emma Stone no ganara, pero, merecidamente, se lo terminó llevando. Christopher Nolan logra llevarse el premio a “Mejor dirección” por primera vez en su carrera y lo logra con lo que es para muchos su obra maestra. “Godzilla Minus One” se lleva el premio a “Mejores efectos visuales” que, por lo que fue la producción y el equipo de quince personas que trabajaron en la película, lo tenían más que merecido.
El segundo y último premio con el que estoy en desacuerdo fue en “Mejor guion adaptado”, pues, aunque “American Fiction” fue una película que sí ofreció mucho, el premio debió ser para “Oppenheimer”, y puede que la Academia le haya entregado ese premio más por “consuelo”. También me duele un poco ver que “Past Lives” se haya quedado sin premios e incluso, en un principio, sin más nominaciones.
En conclusión, esta edición no decepcionó del todo, como lo suele hacer, y supo premiar a las que para muchos fueron las dos mejores películas del año, que fueron “Poor Things” y “Oppenheimer”. Aún así, a muchos amantes del cine e interesados en el tema no les termina de gustar por completo y siempre tendrán algo por lo cuál quejarse, incluso antes de la ceremonia, con el anuncio de las nominaciones.